Parece que la cosa marcha! Me acaban de llamar para decime que de los cinco han pasado a blastocisto tres. Les han quitado una célula para analizarla y los han vitrificado. Ahora mismo tenemos nuestras pequeñas mezclas de ADN guardadas en algún lugar. Da un poco de impresión pensar que estos mini humanos en potencia queden criopreservados a la espera de saber si son aptos genéticamente. Parece una película de ciencia ficción.
El año pasado llegaron a vitrificación cinco y para transferencia pasaron tres el PGS* (estudio de anomalías cromosómicas). Esta técnica identifica los embriones sanos cromosómicamente para la transferencia y descarta los que no son. Según dicen, al seleccionar los mejores, la probabilidad de embarazo tras la implantación aumenta hasta el 70%. Luego habría que restarle al flamante porcentaje factores como mi edad, etc.
Finalmente, en nuestra FIV Plus de 2016 el primer blastocisto que era tipo A llegó a embarazo, el segundo A no sobrevivió a la desvitrificación y el tipo C no fecundó.
Le he preguntado al embriólogo que me ha llamado, si podría darse una tendencia parecida a la del año pasado y me ha comentado lo siguiente. "Esto no son matemáticas, pero si has tenido esas estadísticas puede que se repitan. En el análisis de laboratorio no es muy común que salgan todos sanos"
¡A ver si en nuestro caso sí y fueran tres de tres!
* "El PGS se realiza en el estadio blastocisto, cuando el embrión se encuentra en 5º o 6º día de desarrollo. El procedimiento consiste en una biopsia, a través de la cual se extraen las células sin que se comprometa su desarrollo normal. Tras la biopsia, los embriones se criopreservan hasta que se analizan los resultados y se toman decisiones de forma fidedigna. Una vez estudiados, elegimos aquellos embriones sanos para realizar la transferencia"
